IVÁN CRUZ OSORIO




LOS DOMINIOS PERDIDOS



No tenemos una patria,
tenemos un paisaje,
tenemos cólera, indignación,
tenemos divinidades rotas,
tenemos a los muertos hundidos 
en las entrañas,
tenemos un puñado de escombros
que el viento intenta dispersar.


EPÍSTOLA CON CARÁCTER DE URGENTE


Queridos asesinos:


Buscamos, pedazo a pedazo, un sueño desmembrado para revivir nuestros cuerpos, para encender nuestros cadáveres, para reunir el cielo, el mar, y las montañas de este país de archipiélagos. Quizá puedan ayudarnos, quizá, si trabajamos en equipo, si nos apuramos, quizá todavía se muevan solos, quizá aún palpiten los miembros arrebatados. Por favor, dense prisa, la hierba ya ocupa el lugar de nuestros cráneos, de nuestras narices, del cuenco agusanado de nuestros ojos...




ANDRÉS BELLO

Navegué toda la noche
con la mirada fija en los días por delante,
con el miedo apretado en los puños.

Algo de la Tierra que dejé atrás
ha labrado mi sombra y mi abismo,
y aún no sé de qué patio,
de qué puerto sin brillo partí
con los sueños desvanecidos.

Pero sé que no habrá regreso,
porque nadie vuelve
para atizar los rescoldos
de su propia ceniza.