ÓSCAR DAVID LÓPEZ



CANJE DE ARMAS


hijo, cómo eres tonto, cambia
esa arma de fuego, el cuchillo
cebollero, los cortaúñas de la abuela
y de las tías, las herencias familiares
que consideras cristales sintéticos de oro
y no oro puro, cómo eres tonto
creyendo que un día abrirán una Tiffany
en esta ciudad, hijo, para nada te sirven
a ti los zafiros o las esmeraldas, cambia esa arma
de fuego, no te queda nada ya, ni siquiera
un par de balas para ahuyentar a los lobos
o a los policías, cambia ya los cortaúñas
por esa despensa del gobierno



MARCAPÁGINAS

lado a: “regalemos
un bonito libro
de valores” “poe-
mas y reflexiones
para mi madre”

lado b: “atréve-
te, campeón” “¿nece-
sita dinero? entregue
a un traficante de
drogas”

y el niño tomó cinco: a fin
de cuentas eran ob-
sequio de la librería
cristo rey